Lo Que Creemos

Cultos

domingo español - 9:00 AM | domingo inglés - 11:00 AM

lo que creemos

La Biblia

Que la Biblia es la Palabra de Dios para todos los hombres. Que la colección de 66 libros, de Génesis al Apocalipsis, fueron escritos por hombres divinamente inspirados por Dios, guiados a toda la verdad y libres de todo error en cada asunto que trataron. Es la única revelación completa de la voluntad de Dios para con el hombre y la autoridad suprema por la cual todo será juzgado. Interpretamos sus relatos y mandamientos literalmente, a menos que la Escritura misma indique otra cosa. (II Timoteo 3:16-17; II Pedro 1:20,21; Proverbios 30:5-6; Juan 17:17; Hebreos 4:12-13)

Dios

Hay un solo Dios, santo y verdadero, que existe eterna-mente en tres personas – Padre, Hijo y Espíritu Santo. Cada uno posee todos los atributos de la deidad y a la vez, todas las características de la personalidad, pero llevando a cabo una obra distinta. (Deuteronomio 6:4-5; Génesis 1:26; Mateo 3:16-17; Juan 15:26)

Jesucristo

Que Cristo Jesús es la segunda Persona de la Trinidad quien fue unido para siempre con una naturaleza humana por medio de la concepción milagrosa del Espíritu Santo y recibió un cuerpo humano en el vientre de una virgen llamada María. (Isaías 7:14; Mateo 1:18-25; Lucas 1:30-35)

Creemos que Él fue tentado en todo igual que nosotros, pero no pecó. Aunque vivió una vida perfecta, volun-tariamente se dejó crucificar para así pagar la pena que nuestros pecados merecieron. (Hebreos 4:14-15; Mateo 4:1-11; Romanos 5:11-21; Juan 10:17-18)

Creemos que resucitó literalmente y corporalmente de la tumba al tercer día para demostrar Su poder sobre el pecado y la muerte.
Ascendió al cielo y ahora está sentado a la diestra del Padre, como único Mediador entre Dios y los hombres, para hacer intercesión
continua a favor de los suyos. (I Corintios 15:3-4; Hechos 1:9-12; I Timoteo 2:5)

Creemos que regresará pronto, primero en el aire para encontrarse con todos los creyentes, y luego en forma personal y visible a la tierra, para consumar la historia y el eterno plan de Dios. (I Tesalonicenses 4:13-18; Apocalipsis 19:11-16)

El Espíritu Santo

Que el Espíritu Santo es el tercer miembro de la Trinidad, coigual con el Padre y el Hijo como Dios. Su ministerio entre los no-creyentes es mostrarles su necesidad de Jesucristo. Los no-creyentes pueden aceptar Su llamado ó pueden escoger resistirle, insultarle y aún blasfemar contra Él. (Juan 16:7-11; Hechos 7:51; Hebreos 10:29; Mateo 12:31)

Creemos que en el momento de la salvación, el Espíritu Santo es el agente del nuevo nacimiento, que en ese instante entra a morar en el creyente y le bautiza en el Cuerpo de Cristo. Sella al creyente para vida eterna y empieza en él un ministerio de toda la vida. La única evidencia necesaria de este ministerio del Espíritu es una vida transformada. (Tito 3:5; I Corintios 12:13; Juan 14:16; Efesios 1:13-14)

Creemos que el propósito del Espíritu Santo al morar en los creyentes es de guiarles a toda la verdad de la Palabra de Dios y conformarlos a la imagen misma de Cristo. Mientras siguen su liderazgo, llegan a ser más y más como Cristo, pero cuando escogen su propio camino, contristan y apagan al Espíritu. (Rom. 8:29 Juan 16:13-15; Efesios 4:30; I Tesalonicenses 5:19)

La Caída del hombre

Aunque el hombre fue creado sin pecado para tener comunión con Dios, por un acto de desobediencia, Adán, y por medio de él toda la humanidad, se encuentra separada de Dios por una desobediencia innata hacia Dios llamada “pecado.” Toda la humanidad es impulsada por su pecado a cometer pecados innumerables y merecen nada más que una eterna separación de Dios. (Gén. 3:6-7; Rom. 3:10, 23; Romanos 5:12, 19; Marcos 7:20-23; Santiago 1:13-15)

la salvación

Es un regalo de Dios al hombre, hecho posible sólo por la gracia de Dios y el sacrificio de Jesús en la cruz. El hombre nunca puede pagar por su pecado con buenas obras. Sólo al confiar exclusivamente en el sacrificio de Jesús como el único plan para obtener el perdón puede el hombre ser salvo de la pena del pecado. (Romanos 6:23; Efesios 2:8-9; Juan 14:6)

La eternidad

Que el hombre fue creado para existir para siempre. Existirá eternamente separado de Dios debido al pecado, o en comunión con Dios por medio del perdón y la salvación. El estar separado de Dios es en el infierno. El estar en comunión con Dios es vida eterna en el cielo. El cielo y el infierno son lugares literales de existencia eterna. (Juan 3:16-18; I Juan 5:11-13; Romanos 6:23; Apocalipsis 20:15)

la seguridad eterna

La vida eterna empieza en el instante que uno recibe a Cristo Jesús en su vida por fe. Debido a que Dios le da la vida eterna al hombre, el creyente puede estar seguro de su salvación para siempre. La salvación se mantie-ne por la gracia y el poder de Dios, no por esfuerzo personal del creyente. (Juan 10: 27-30; Romanos 8:35-39; Hebreos 7:25; 10:10-14; I Pedro 1:3-5)

Satanás

Es un ser real, histórico; un ángel caído quien se enalteció por orgullo y se rebeló contra Dios, llevando consigo a un ejército de ángeles con él. Su derrota fue sellada por la obra de Cristo en la
cruz. Su destino final es el lago de fuego. (Isaías 14:12-17; Hebreos 2:14; Apocalipsis 20:10)

Creemos que es el padre de mentiras quien guia desa-percibido las vidas de aquellos sin Cristo. En el mo-mento de la salvación es arrojado de ese puesto por el Espíritu Santo y deja de tener poder sobre el creyente, a menos que este se presente como instrumento al pecado. Es nuestro adversario principal en la vida diaria quien puede ser derrotado a cada paso si nos ponemos toda la armadura de Dios y le resistimos, siguiendo la verdad de la Palabra de Dios. (Prov 14:12; Romanos 6:12-14; Efesios 6:10-17;
Santiago 4:7-8)

la iglesia

La asamblea local de creyentes , conocida como la Iglesia, es el instrumento de Dios para esta era. Creemos que cada verdadero creyente en Cristo comparte en una relación familiar con Dios como nuestro Padre y que a la segunda venida de Cristo estaremos todos unidos para formar el Cuerpo de Cristo. Pero, la gran mayoría de las referencias bíblicas de la palabra “iglesia” se refieren a una asamblea local y visible de creyentes, y como tal, es a nivel de la iglesia local que toda la responsabilidad y la autoridad yace hoy en día. (I Tes. 4:13-18; Mat. 18:15-18)

Creemos que la Gran Comisión es la responsabilidad primordial de cada iglesia local como un cuerpo y de cada individuo como miembro de dicho cuerpo. Es en cada iglesia local donde yace la autoridad de llevar a cabo las ordenanzas del bautismo y la Cena del Señor. (Mateo 28:18-20; Hechos 1:8; I Corintios 11:23-29) Creemos que el liderazgo de la iglesia es delegado por Cristo mismo a los pastores (conocidos también como “obispos” o “ancianos”) y ante Quien tendrán que dar cuenta. Cuando fuera necesario, podrán ser ayudados a llevar a cabo la obra por aquellos que funcionan como diáconos. (Efesios 4:11-16; I Pedro 5:1-4; I Tim. 3:1-13)

Creemos que cada miembro de la iglesia local tiene la responsabilidad de ministrar la Palabra deDios y apoyar el ministerio de la iglesia por medio de la oración, una vida santa, el dar diezmos y ofrendas, y siguiendo el liderazgo que Dios ha puesto sobre ellos. Deben tratarse el uno al otro de acuerdo a las normas establecidas en la Escrituras y resumidas en los “Unos a Otros”
encontrados en las epístolas del Nuevo Testamento. (Efesios 4:12; II Timoteo 2:2; I Cor. 16:2; II Cor. 9:6-8; Hebreos 13:7,17; Filipenses 2:1-4)

Creemos que los valores principales que Cristo requie-re de Su iglesia es amor, para que el mundo sepa que somos Sus seguidores, y unidad, para que el mundo crea el mensaje que predicamos. (Juan 13:34-35; 17:21)